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Roadsters Imprescindibles

Barchetta. El roadster italiano diferente.

Con esta primera ficha, trato de hacer un somero informe de uno de los roadsters admitidos por el club. He decidido empezar por uno de los menos habituales en nuestras carreteras (no por ello menos bello), para dejar para más adelante a los reyes del club.

Si el tiempo y las energías me acompañan, la intención es ir completando las fichas del resto de roadsters, poco a poco.

Los antecedentes:

En 1966, se presentaba el 124 Spider obra de Pininfarina para rivalizar con los Alfa Giulietta, y con los británicos MGB y Triumph Spitfire

Fiat mantendría la producción del modelo hasta 1981, año en que traspasa la fabricación del roadster a la afamada carrocera turinesa, fundada en 1930 por Battista «Pinin» Farina. Esta mantendría la producción incrementando las ventas hasta 1985.

Aunque por su configuración mecánica y nombre, el sucesor directo es el actual Fiat 124 Spider de 2016, antes tendría un sucesor nacido en plena década de los noventa con otra denominación y otra configuración mecánica, pero que era heredero del espíritu de los Spider italianos.

A comienzos de los noventa las marcas contemplan como el escenario para los roadster ha cambiado. Tras un paso por el desierto determinado por la crisis del petróleo y las normas de seguridad en el que solo parece haber resistido el vetusto Alfa Romeo Spider. Hacen aparición el irrepetible y tecnológico BMW Z1 (1988) y el icónico y éxitoso  Mazda Mx5, popularmente conocido como «Miata».

En Fiat se plantean entonces la idea de retomar su trayectoria como productores de vehículos deportivos y nacen en ese momento dos proyectos paralelos: el del  Fiat Coupe y el del Barchetta, para recuperar el prestigio de la marca de la región de Piamonte. Así en 1994, tras casi una década de sequía roadster por parte de la marca italiana, los italianos se deciden a lanzar al mercado un nuevo modelo de roadster un tanto diferente.

El objetivo no era sustituir directamente al 124 Spider, sino tener representación en el sector de los pequeños descapotables. Los antecedentes directos eran el 850 spider caracterizado por su económico mantenimiento y su simplicidad mecánica y por otro lado el X 1/9 de líneas más futuristas, más práctico y eficaz deportivamente que el anterior.

Nacimiento del modelo:

La marca no buscaba solo ofertar un pequeño y asequible descapotable, donde la diversión al volante estuviese asegurada, sino que perseguía también otro objetivo que era que junto con el Fiat Coupé formaran la columna vertebral de los vehículos emocionales de la firma. 
Para ello se crearon los proyectos Pizza. El Barchetta se desarrolló dentro del proyecto Marinara y el Coupé lo hizo en el proyecto Diavola.

En el caso del roadster contó con un diseño acertadamente inspirado en el Ferrari 166 MM de 1948. Tomando también detalles del anterior124 Spider.
La base utilizada no es otra que la del Punto coetáneo (1993-1996) conocido internamente como proyecto 176. Pero se modificó para la ocasión reduciendo la distancia entre ejes.

Diseño Exterior:

El pequeño bote, que es lo que significa Barchetta en español tuvo un desarrollo de cuatro años (de 1990 a 1994), recibiendo la denominación de proyecto Spider 176 Tipo B y fue un logro del Centro de Estilo Fíat en Turín.

Andreas Zapatinas fue el responsable del diseño original del Bachetta que bebía del diseño del Ferrari 166 MM de mediados de siglo (XX) y el Fiat 124 Spider.  El griego se mantendría como cabeza del proyecto hasta bien avanzado éste, cuando en 1993 fue nombrado jefe de diseño de Alfa Romeo. En ese momento tomó el relevo del diseño Alessandro Cavazza, bajo la supervisión de Peter Barrett Davis en el «Centro Stile Fiat».  Hasta que en 1995 «il bellíssimo italiano» entró en finalmente en producción.

Según los diseñadores las líneas maestras del convertible trasalpino recrean las líneas orgánicas que caracterizan a los animales marinos. La suavidad de líneas predomina en el frontal y la parte trasera. Para en el lateral caracterizarse por una línea de tensión que emula una ola marina, que repite o hace juego con la línea de cintura , dotando a todo el conjunto de un diseño muy natural.

Zapatinas creó una carrocería elegante y al mismo tiempo deportiva, de formas curvas y fluidas, de proporciones clásicas y ausente de formas agresivas.

Sin embargo, la sensación de fluidez no impide que el convertible esté plagado de detalles de diseño reseñables y que lo diferencian de otros modelos del segmento. El coche como todo buen roadster que se precie es bajo y de dimensiones y peso contenidos. Midiendo unos 3,92 m de largo, 1,64 m de ancho y 1,27 metros de alto. Y arrojando en la báscula un valor de 1056 kg sin aire acondicionado.

Se trata de un modelo compacto de buena aerodinámica que se hizo con el premio de Cabriolet del año. Sabiendo conjugar elementos clásicos como las manetas de las puertas enrasadas con la carrocería con otros más actuales. Destaca su largo morro al más puro estilo clásico y la línea de cintura en relieve que discurre por todo el lateral como en el Ferrari 166MM y que lo dota de un aspecto muy particular. Todo en él es fluidez de líneas y sorprende que sin alterar esa armonía, la corta parte trasera sea poderosa y rotunda. Sin duda todo un acierto la conjugación de todos los elementos en un conjunto que en el momento de su lanzamiento hasta parecía un tanto anodino entre las formas imperantes en ese momento y al que el paso del tiempo ha acabado demostrando su eficacia.

Destacan detalles como las manillas de metal embutidas en las puertas quedando a ras de la carrocería, que rememoran a convertibles clásicos, o los faros carenados, conviviendo con elementos plenamente modernos y prácticos. Sobresale el modo en que se ha resuelto el tema de la capota que es de apertura y cierre manual, quedando oculta bajo una tapa del color de la carrocería, que le da un diseño muy limpio al ir descapotado y que cuando se cierra la capota ésta se apoya sobre dicha tapa. Un tema resuelto con ingenio y buen gusto y que ayuda a diferenciar al roadster italiano de otros diseños rivales.

Para los climas más rigurosos o para los que temen por la seguridad del vehículo con un techo de lona, hay disponible un Hard Top. En resumen, el Barchetta bebe de diseños clásicos pero no es en absoluto un modelo antiguo sino un modelo moderno y eficaz dinámicamente.

Diseño interior:

El primer concepto Spider propuesto por Peter Davis y José Bertolusso, fue el que marcó la pauta a seguir. Con un interior en el que predominan la simplicidad y la practicidad y una buena ergonomía. Con tan solo un detalle mal resuelto: el reloj digital de la zona baja de la consola, que obliga al conductor a adoptar una posición distinta de la de conducción para poder hacer la lectura del mismo.

El interior de la cabina es envolvente y la posición de conducción como es usual en este tipo de coches es deportiva y baja. En cuanto a la calidad percibida los materiales sin ser de máxima calidad, dan sin embargo una apariencia agradable.

El salpicadero de generoso tamaño está realizado en un plástico resistente al agua. La simplicidad de su diseño no está reñida con el típico diseño al que nos tienen acostumbrados los spiders trasalpinos, que siempre nos regala detalles que hacen muy agradables y llamativos sus interiores.

Así en contraste con el negro imperante hay inserciones pintadas en el mismo color de la carrocería en la parte inferior del salpicadero y en las puertas. Todos los elementos del habitáculo están bien dispuestos y los mandos al alcance de la mano.

Los asientos de inconfundible diseño italiano, ofrecen un amplio espacio para dos personas, algo muy típico de los Spider italianos. Hay algo en el que nos retrotrae en el tiempo, a esa saga de convertibles que le precedieron. Con una palanca de cambios corta, el parabrisas típicamente cercano a los pasajeros y un cuadro de mandos dotado de esferas blancas. La radio específica, queda perfectamente integrada en el bloque central.

El Maletero:

Caracterizado por una boca de carga superior, cuyo diseño ayuda a la rigidez del conjunto tiene una capacidad de 165 litros, que es suficiente para dos personas en una escapada de fin de semana y como se ha demostrado en algún otro roadster de similar capacidad, para un Tour por Europa. Cuestión de organización y de llevar lo estrictamente necesario.

Para aumentar su capacidad hay disponible un portamaletas que también nos trae a la memoria la imagen de los roadsters clásicos. Un detalle a reseñar es que la capota manual una vez recogida no le roba espacio al maletero.

El Chasis:

La base que la marca del norte de Italia utilizó para la realización del vehículo fue una evolución de la del utilitario «Punto», recortada y modificada con algunas piezas del compacto «Tipo» y reforzada convenientemente para la ocasión. Todo esto impedía la elección de la propulsión trasera, clásica en el concepto roadster y determinaba la elección de la tracción delantera para el nuevo modelo. Esto contrarió a muchos puristas que veían como los italianos abandonaban la propulsión (que si había montado su antecesor el 124 Spider mientras en esas fechas los japoneses de Mazda con su MX5 si ofrecían esa alternativa clásica.

El Motor:

Para animar al Barchetta la marca introduce por primera vez en su historia el primer motor de distribución variable. Incorporando la tecnología DOHC.  Siglas de double overhead camshaft en inglés (doble árbol de levas en cabeza en Español) esta tecnología usa dos árboles de levas, ubicados en la culata, para operar las valvulas de escape y admisión del motor.

Como comentamos, para la ocasión se estrena por primera vez en un producto de la firma Turinesa el motor DOHC multiválvula de 16 V. (dos de admisión y dos de escape por cilindro) con 1.747 cc de cubicaje y árbol de levas variable.

Fue la única motorización de la familia modular Fiat, que movió al ligero vehículo a lo largo de su fabricación. Entregando una potencia de 131 caballos a un régimen de 6.300 revoluciones por minuto. Cifra que varía según los mercados.

Con la implementación de la apertura variable de las vávulas de admisión se logra obtener un mejor equilibrio entre consumos, emisiones y prestaciones y favorece asimismo la entrega de par a bajas vueltas y la potencia a altos regímenes de revoluciones. Este motor (y en esto se parece sorprendentemente al 124 Spider de 2016 animado por un 1.4 turboalimentado, a pesar de la diferente concepción de sus motores) ofrece más del 90% del par disponible ya a partir de las 2.000 rpm aunque como buen atmosférico multiválvulas se muestra con garra a partir de las 4.000 rpm.

El compacto motor tetra cilíndrico se basta para alcanzar los 200 km/h de velocidad punta y le permite al deportivo italiano parar el crono en el 0-100 km/h en solo 8,9 segundos. Todo ello con un consumo medio de 8,4 litros cada 100 kilómetros.

Su fabricación se llevaba a cabo en la planta de Fiat Pratola. Ha demostrado ser un motor fiable, flexible económico de mantener y resistente. Otros modelos de carácter deportivo de Fiat montaron este motor en sus chasis, como son el caso del Coupé y el Punto HGT.

El consumo que con una visión actual puede parecer un poco elevado, no lo era en el momento de su lanzamiento y menos tratándose de un convertible de tintes deportivos. Además a nivel acústico se deja sentir nos premia con un sonido agradable. Sumándose esto al haber de las sensaciones positivas que nos regala el Barchetta (pronunciado Barqueta en castelllano).

Un coche tan vivencial como lo es un roadster debe ser una cascada de sensaciones al fin y al cabo. En este caso a la sensación de llevar el cielo por techo el motor aporta unos buenos bajos, estira muy bien en altas, nos regala un bonito sonido y todo ello con una buena fiabilidad y economía de mantenimiento muy contenida.

Tecnología:

Sistema de frenado:

Dotado de cuatro discos de freno. Con un diámetro de 257 mm y ventilados en las ruedas delanteras y un diámetro de 240 mm en las traseras y un entrecruzado doble con corrector que busca mantener el control del vehículo en todo momento, cuenta con la opción de equipar el sistema Antibloqueo de frenos (ABS) con cuatro canales como opción. Siendo este montado de serie en algunas series limitadas. Todo esto unido a la ligereza del vehículo y a una eficaz suspensión independiente le confieren un frenado poderoso a nuestro protagonista.

Suspensión:

EL sistema elegido para la ocasión fue el de suspensión independiente delante, extremadamente resistente, con brazos armados de hierro fundido para resistir las fuerzas de duras frenadas en curvas. Con estructura MacPherson con muelles rígidos.

Éste la había desarrollado para el Ford Cónsul en 1951, pero su uso no se popularizo hasta mucho después. Se trata de una suspensión simple y de bajo costo de fabricación y que equipan el 87,5 % de los coches actuales.

Para la parte trasera se eligió una suspensión trasera de brazos tirados semi-independientes y barra estabilizadora.

Dirección:

Posee una dirección caracterizada por su rapidez. Ésta es del tipo de cremallera y asistida.  Para mejorar la entrada en curva tiene una relación de 15:1.

Seguridad:

Seguridad pasiva:

Para la construcción del bastidor se usaron una serie de innovaciones técnicas. Así partiendo de la base reforzada anteriormente comentada, a ésta se la doto en los extremos de zonas de deformación progresiva y barras anti-intrusión en las puertas.

Asimismo, se creó un anillo de refuerzo tubular de alta resistencia para el marco del parabrisas. Todo este conjunto le otorgaba una rigidez torsional de 50.000 kgm/rad, convirtiéndolo en el coche más robusto de su categoría. Ese anillo tubular hace tan resistente a la zona de parabrisas que funciona como arco antivuelco en caso de accidente.

Como complemento a las soluciones adoptadas en la fabricación del bastidor y la carrocería, al coche se le incorporaron el airbag de conductor (el de copiloto estaba solo disponible como opción), los cinturones de seguridad con pretensores, el interruptor de inercia en el sistema de encendido y además para evitar el deslizamiento por debajo del cinturón en caso de colisión va equipado con asientos delanteros con resistencia a dicho efecto (submarining).

También dispone de una columna de dirección de seguridad telescópica que evita males mayores en caso de choque. Y del FPS (Fire Protection System) sistema de protección de incendios.

Seguridad activa:

Para conseguir una elevada nota en este apartado el spider italiano cuenta con un reparto de pesos del 65% delante 35% detrás, buscando la carga de peso sobre las ruedas motrices y combina la tracción delantera con una suspensión independiente MacPherson en el eje delantero y  una suspensión mediante brazos tirados semi-independientes en el eje trasero dotado de estabilizadora.

Además cuenta con un sistema de frenado de cuatro discos (ventilados los delanteros) con ABS y está dotado una dirección rápida.  Con ello consigue un comportamiento equilibrado, un ágil paso por curva y una frenada potente.

Las directrices de seguridad para el Barchetta se corresponden a las prescritas para las berlinas de Fiat.

Equipamiento:

Como es norma en este tipo de vehículos ligeros, biplaza y convertibles, el equipamiento de serie no es muy extenso, pues el objetivo es el vivir un cúmulo de sensaciones aportadas por la deportividad de su conducción, la libertad de la conducción al aire libre y el sonido de su mecánica y escape. Quedando relegado a un segundo plano todo accesorio considerado superfluo.  Así de serie incluye dirección asistida, elevalunas eléctricos, cristales ahumados, y un equipo estéreo en formato radiocasete. Que nos retrotrae al momento de sus primeros años de comercialización.

En cuanto a equipamiento opcional se refiere, tenemos: el ABS, la tapicería de cuero, el aire acondicionado, alarma, el cierre centralizado, la pintura metalizada y las llantas de aleación.

Cabe destacar la extensa gama de colores disponibles para la carrocería y que el color de la lona de la capota no se restringía al habitual negro.
A lo largo de los años de producción del modelo fueron editándose muchas series limitadas.

Evolución:

Para entender mejor los cambios efectuados en el modelo a través del tiempo es bastante clarificador el conocer los avatares de su producción y a los que dedico capítulo aparte.

Corría el año 1999 cuando se llevó a cabo una evolución de la mecánica, tras 4 años en el mercado. Se acometieron una serie de cambios: por un lado se renovó la centralita y se modificó el colector de admisión. Al mismo tiempo se le instaló un acelerador electrónico y se alargó un poco el desarrollo de la quinta velocidad. Por el camino perdió la admisión variable.

El objetivo de esta evolución era disminuir el consumo y bajar las emisiones para adecuar la mecánica a la nueva normativa europea, Euro3.
Ya en 2002 y con 7 años a sus espaldas se le instala un equipamiento más amplio a un precio más contenido. Lo cual lo sitúa en el escalón más asequible de los descapotables en ese momento.

Un año después recibe un lavado de cara o remodelación estética que afecta primordialmente a la defensa delantera que si bien lo pone al día estéticamente con su entorno le quita parte de su personalidad única. También recibieron cambios en este restyling las tapicerías de los asientos. Este cambio no solo afecto a nivel estético sino que como se narra en el siguiente capítulo la carrocería pasó de estar fabricada con un espesor de 0,7 mm a 0,9 mm.

Por último, se le instaló una curiosa tercera luz de freno que siguiendo con la línea del diseño que emulaba las líneas de los animales marinos en toda la carrocería, en este caso concreto se inspiraba en la aleta dorsal de un tiburón, situándola integrada en el centro de la parte superior del portón trasero. Aunque la óptica en sí recuerda a una gema, para no desentonar con los curiosos faros traseros embutidos en la carrocería y de formas similares a ésta.

Fabricación/producción:

En la fabricación del Barchetta estuvieron implicadas varias fábricas y su montaje tuvo una serie de avatares que hicieron que no toda su producción se realizase en la misma factoría desde 1995 hasta 2005.

La fábrica ILCAS situada en la región de Sparone Canavese se encargaba de la soldadura de la estructura y la carrocería del vehículo. Luego éstas eran enviadas a Carrozzeria Maggiora que realizaba el montaje final en la planta de Chivasso.

El primer modelo de prueba se ensambló en septiembre de 1994 con el número de chasis 00000099. Pero la producción en serie comenzó a finales del mes de marzo de 1995. El Fiat Barchetta fue así ensamblado en las instalaciones del carrocero Maggiora hasta que esté quebró cesando su actividad en 2002.

Ante esta tesitura, a Fíat no le quedó más salida que interrumpir la producción del Barchetta, hasta que tuviese lista una línea de montaje destinada a tal fin, en una nueva ubicación. Sería al año siguiente cuando se retomó la fabricación en la fábrica de Mirafiori, aprovechando para introducir la actualización estética qué antes comentaba y que afectaba principalmente al paragolpes delantero y al portón del maletero con la integración de una tercera luz de freno.

Esta actualización fue presentada en el salón de Bolonia y se lanzaría al mercado un año después. Dicha puesta al día no convenció al público como la fábrica habría deseado y la producción se vio de nuevo interrumpida hasta el mes de abril de 2004.

Algo menos visible pero de mayor importancia en la composición del coche, fue la sustitución de la chapa de 0.7 mm, que se usaba para su fabricación hasta entonces por una de 0.9mm. Esto venia motivado principalmente por el riesgo de alabeo de ciertas piezas como el capó tras muchas aperturas y cierres. Este cambio hizo al Spider más robusto.

El Barchetta solamente se produjo con volante a la derecha para el Reino Unido y Japón. El resto de la producción que fue la mayoría se comercializó con volante a la izquierda.

En junio 2005 el último Barchetta salía de la línea de producción y tendría que pasar otra década para que un nuevo spider fuera alumbrado por la Marca de Turín. En este caso resultado de una Joint Venture (alianza estratégica) con la Japonesa Mazda, fabricante del afamado MX5 que nació en 1989 y que ya va por su cuarta generación.

Conclusión:

El Fiat Barchetta es un convertible biplaza heredero de los spider italianos de toda la vida y como tal atrae hacia él una mirada nostálgica y es que a pesar de nacer con el pecado de no ser un propulsión trasera. Solventa este hándicap con un comportamiento dinámico divertido y con una configuración de suspensiones y frenos que le permiten enlazar curvas a muy buena velocidad en una carreta de montaña que es el entorno natural de un roadster a lo que también ayuda el buen desempeño de su mecánica, que si bien no es una bomba, es más que suficiente para mover el coche con soltura hasta alcanzar los 200 kilómetros por hora de velocidad punta y acelerar de 0 a 100 en 8,9 segundos.

Todas estas prestaciones se acrecientan al circular descapotados, llegándonos mezclados el agradable sonido del motor y el escape, con los de la naturaleza. 

En este «pequeño bote» hay ese algo difícil de definir que tienen los productos italianos. Como lo tienen las Vespas, las lanchas Riva en el lago di Como, o un buen traje italiano. A priori no son los más bellos, quizás no son los mejor fabricados, ni los más resistentes, pero el tiempo pasa por ellos y se convierten en iconos que nunca aburren. Hay cosas que no se compran, como la elegancia y en el país trasalpino saben algo de ello.

Con el Barchetta, Fiat trajo de vuelta a la vez que Alfa Romeo con su Spider el concepto de spider italiano adaptado al mercado de los noventa y a sus propias circunstancias empresariales.

Estamos ante un coche que roza los cuatro metros, pero que dispone de un interior amplio para dos adultos, con un maletero justo pero suficiente y con opción a instalarle un trasportín sobre el maletero e incluso un hardtop para goce de los amantes de dicha opción. Con un consumo dentro de lo razonable incluso para parámetros actuales de un roadster y con una economía de mantenimiento que permitirían su uso diario. Y que puede transportar un total de 450 kilos.

El Barchetta tiene además una particularidad, que es cada día más difícil de ver y que a mí particularmente me atrae mucho en un coche. Y es que es diferente, es exclusivo, tiene personalidad propia. Los gustos son particulares y en el momento de su lanzamiento podía parecer anodino, poco arriesgado, pero nunca se le pudo echar en cara a Fiat haber hecho un spider sin personalidad. Lo mires en el ángulo que lo mires tiene detales de diseño distintos a todo lo que se suele ver por nuestras carreteras.

No estamos ante un deportivo que sea la bestia parda de los circuitos, estamos ante un deportivo biplaza ligero, fabricado para ser una catarata de sensaciones viajando por bellos parajes.

En una de las fuentes que he consultado para la realización de esta ficha del Barchetta y que acompaño al final del texto, hacían este comentario: «No va extremadamente duro en paso por curva, sino que es un coche que balancea, apoyado en unas estabilizadoras relativamente blandas, pero resulta muy predecible y agradable de conducir. Si quieres, hasta puedes meter a la trasera en acción ahuecando el pedal derecho de golpe en pleno apoyo, para ceñirte al vértice de la curva.»

Dimensiones, pesos, capacidades:

Largo: 3,92 metros de largo.
Ancho: 1,64 metros
Alto: 1,27 metros
Peso: 1.056-1135 kilogramos
Batalla: 2,275 metros
Vía delantera 1,412 metros
Vía trasera 1,407 metros
Capacidad deposito: 50 litros
Capacidad maletero: 165 litros
Diámetro de giro entre bordillos 10,5 metros
Vueltas de volante entre topes: 2,5
Llantas: 6,5 X 15 en ambos ejes
Neumáticos: 195/55 R15 V

Bibliografia y fuentes:

http://revistacoche.blogspot.com/2013/04/un-poco-de-historia-el-fiat-barchetta.html?m=1

https://debates.coches.net/discussion/237990/usado-si-pero-interesante-fiat-barchetta

http://www.supermotor.com/revista/pruebas/253497/fiat-barchetta-18-16v:-regreso-futuro.html

Fotos:
Las fotos utilizadas en el presente hilo, fueron descargadas del buscador de Google utilizando la configuración de búsqueda de: «etiquetadas para su reutilización» y se acompaña a continuación toda la información sobre su autoría y ubicación. Desde aquí agradecer su contribución a los autores.

Fiat 124 Spider 1970.
Page URL: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Fiat_124_sport_Spider_001.jpg
File: https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/2/28/Fiat_124_sport_Spider_001.jpg
Attribution: Arnaud 25 [Public domain]

Fiat 1X9.
https://commons.wikimedia.org/wiki/Image:Bertonex191500wiki.jpg?uselang=it

Foto diseño exterior.
Page URL: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Fiat_Barchetta_%E2%80%93_Frontansicht,_3._Juni_2011,_W%C3%BC lfrath .jpg
File URL: https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/c/c0/Fiat_Barchetta_%E2%80%93_Frontansicht%2C_3._Juni_2011%2C_W%C3%BClfrath.jpg
Attribution: M 93 [CC BY-SA 3.0 de (https://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0/de/deed.en)]

Diseño exterior 2.
Page URL: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Fiat_Barchetta_(5753340778).jpg
File URL: https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/2/22/Fiat_Barchetta_%285753340778%29.jpg
Attribution: nakhon100 [CC BY 2.0 (https://creativecommons.org/licenses/by/2.0)]

Diseño interior.
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Archivo:Fiat_Barchetta,_Bj._1997_-_Cockpit.jpg
Baca maletero.
Page URL: https://www.flickr.com/photos/fotoraffo/21188214718
Motor.
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Archivo:Fiat_Barchetta_002.JPG

Seguridad.
https://www.flickr.com/photos/54808174@N04/13999379896

Grupo Barchettas.
Page URL: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Fiat_Barchetta_8600.jpg
File URL: https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/d/d4/Fiat_Barchetta_8600.jpg
Attribution: Pelz [CC BY-SA 3.0 (https://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0)], from Wikimedia Commons

Capota.
https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Fiat_Barchetta_black_hl.jpg

Barchetta & Barchettina.
Page URL: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Fiat_Barchetta_(2003)_%26_Barchettina_(33394888844).jpg
File URL: https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/6/65/Fiat_Barchetta_%282003%29_%26_Barchettina_%2833394888844%29.jpg
Attribution: Andrew Bone from Weymouth, England [CC BY 2.0 (https://creativecommons.org/licenses/by/2.0)]

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